
Repaso azulino y jerezano en un derbi dominado de cabo a rabo por el Xerez Toyota Nimauto. Tras una primera parte igualada, los de Azurmendi sacaron el rodillo en la segunda mitad para zamparse a un Cádiz sin identidad ni alma. Sin vestir de amarillo en Jerez. Joselu hizo dos goles, Pablo Sucino otro y Jaime Ramos se sacó de la chistera el gol de la noche. El ambiente de futsal en el Ruiz Mateos fue impresionante. Un derbi de 10 donde Jerez reinó.
Volvió el público con normalidad al Ruiz Mateos en la ocasión más especial de la temporada. El destino se puso juguetón en el inicio de temporada del Xerez Toyota Nimauto y deparó un derbi en la primera jornada del Grupo V de Segunda B.
El Cádiz Virgili visitaba el Ruiz Mateos en el inicio de una temporada, con las mismas aspiraciones para los azulinos, salvar la categoría. El Ruiz Mateos presentó un ambiente sensacional, muy parecido a antes de la Pandemia. La normalidad poco a poco iba llegando al deporte.
El ambiente desde el calentamiento en el pabellón jerezano era brutal. El Kolectivo Sur y todo el xerecismo hacían temblar los cimientos del Ruiz Mateos. Era un derbi y así había que vivirlo. Igual que los gritos que recibió Germán, ex xerecista, en su retorno a Jerez.
Un derbi con viejos conocidos. Álex del Amor y Germán volvían como cadistas al Ruiz Mateos tras defender la camiseta del Xerez la temporada pasada. Pepe Narváez, técnico amarillo, también entrenó al Xerez Toyota Nimauto.
El partido comenzó eléctrico. Con alternativas para los dos equipos. Tuvo Jaime Ramos una buena ocasión en los primeros cinco minutos que despejó el portero amarillo (de verde sobre la pista jerezana). Replicó Germán poco después con un remate alto y Joni, nuevo guardameta del Xerez, despejó otro buen disparo.
Sorprendió que el Cádiz Virgili no vistiera de amarillo en el Ruiz Mateos. Lo hizo de granate. Por momentos no parecía el Cádiz, para los tradicionales y nostálgicos. La igualdad dominaba el marcador con 0-0 en los primeros nueve minutos, pero también sobre la pista, donde no existía dominador. La fiesta estaba en la grada, que no paraba de animar. El ambiente era de Primera División. Temblaba el Ruiz Mateos. Era un derbi.
Y en el minuto 10 se abrió la bolsa de patatas. Tras un buen pase interior, Joselu, de primeras, la puso en el fondo de la red. Era el 1-0 en el ecuador de la primera mitad. Explotó la bombonera de júbilo. Se estaba viviendo una fiesta de fútbol sala. En el 40×20, la normalidad vital si existía durante 40 minutos de pasión.
Otras vez Joselu, otra vez el killer. El pívot xerecista ya fue un hombre muy importante la temporada pasada y lo quería ser en esta también. El Xerez había empezado a ser superior antes del 1-0 y lo estaba siendo también tras el primer gol del partido. A falta de 8 minutos tuvieron los azulinos una doble ocasión buenísima. En la segunda, Samu rozó la pelota con la portería vacía tras un pase desde el primer palo y en la primera, Grimaldi, la estrelló en el poste.
Un minuto después, Joni salvó el empate en una buena llegada de Germán. El guardameta local se la detuvo a bocajarro al pívot ex xerecista. A falta de 6 minutos, Isra vio amarilla tras una peligrosa entrada sobre Germán, cuando estaba a punto de internarse en el área. El peligro cadista lo estaba llegando el ex xerecista. El disparo de falta directa lo despejó la defensa azulina.
El Cádiz Virgili empezó a apretar en el tramo final de la primera mitad, y en el minuto 16, Joselito hizo el 1-1 para empatar el partido. Tras una pelota desviada al segundo palo, el 9 amarillo, a la media volea, y casi desde el suelo, logró superar a Joni con algo de fortuna y anotar el empate. Joni se tiró al suelo y la pelota pasó llorando por encima suya para meterse sutilmente en la red.
Tras el empate, se vino arriba el Cádiz. En el 17 y medio, Joni le sacó una buena parada con el pie a Álex del Amor. El gol del empate había sido un palo por el momento que era y la grada apretaba para levantar de nuevo la moral. El descanso llegó al Ruiz Mateos con un final de primera parte muy igualado, nuevamente. No hubo gran dominio por parte de ninguno en los primeros 20 minutos, a pesar de los dos momentos que tuvieron ambos equipos de empuje y el empate era justo por el momento.
Algunos jugadores del Xerez Deportivo FC estuvieron presentes en el Ruiz Mateos viendo a la sección de fútbol sala. La segunda mitad comenzó con intensidad e igualdad, como terminó la primera. Buscó el capitán azulino, Antonio de la Flor, el segundo, en la primera ocasión de la segunda parte con un buen disparo que se fue desviado.
El partido se iba calentando por momentos. Era un derbi y eso se notaba en la pista y en la grada. Se tenía que notar. Joni, el jugador amarillo, vio amarilla, por una entrada sobre el otro Joni, el portero azulino.
Y en el minuto 24, volvió a estallar la bombonera xerecista con el segundo gol del Xerez. Los azulinos se plantaron con un 3 para 1 por el costado izquierdo. Christian regateó al defensa hasta la línea de fondo, la puso atrás y Pablo Sucino anotó a puerta vacía con el interior. Era el 2-1 y el Ruiz Mateos estalló de alegría. Se vino abajo. Las gradas temblaban. El ambiente era gigantesco.
El equipo se había venido arriba y la grada era una fiesta. En el minuto 25 lo volvió a intentar Joselu y la réplica del Cádiz vino a la contra con un pase que a punto estuvo de ser rematado a portería vacía. El partido no podía estar más emocionante.
La volvió a tener Dopico en el minuto 26 picándola y Joselu segundos después sin conseguir rematar. Todo podía pasar pero el Xerez estaba siendo mejor y estaba siendo poseedor de las mejores ocasiones en la segunda mitad.
Joselu estaba siendo un dolor de muelas para la defensa del Cádiz Virgili. En el minuto 28, dos remates suyos lo despejó la defensa amarilla. El pique de los xerecistas con Germán era increíble. No solamente en la grada, también en la pista. Era un “todos contra él”. Un jugador azulino del banquillo vio amarilla por darle un empujón. Todo el banquillo azulino le recriminó un posible piscinazo en la banda.
En el minuto 29, otra vez Joselu, tuvo el tercero. Le llegó la pelota al área, sólo, pero cuando fue a rematar, el portero visitante se le echó encima. El ‘uy’ fue de categoría. Solamente restaban 10 minutos de derbi. Pero eso en el 40×20 es un mundo.
Pero el Xerez Toyota Nimauto quería hacer de esta plácida noche, una noche grande. En el minuto 30, tras un saque rápido y de listo desde la banda, Joselu disparó de primeras y pilló a todo el Cádiz desprevenido para anotar su doblete particular. El Xerez colocaba el 3-1 en el marcador.
Joni sacó una gran parada al otro Joni amarillo en el minuto 32 y a la contra, Antonio de la Flor, desperdició una muy buena ocasión. Dos goles de ventaja en fútbol sala no cierran un partido y en esas andaba el Cádiz, intentando meterse, ante un Xerez superior en todo. Estaba siendo tan superior que tuvo tiempo para que el pabellón entero se quitase el sombrero con el mejor gol del partido. Jaime Ramos se coló por el carril central, regateó a uno, a dos, a tres, hizo la croqueta, se tomó un café, una tortilla, unos boquerones, y la coló por debajo de las piernas del portero. Un golazo espectacular para anotar el 4-1 en el luminoso del pabellón jerezano.
El Cádiz Virgili comenzó a jugar con portero jugador a falta de 5 minutos y el Xerez a la contra intentaba cerrar a cal y canto el partido. Joselu desde lejos y a portería vacía tuvo su tercer gol. Los amarillos, sin su color principal en Jerez, apretaban pero no podían. La grada si que apretaba pero a lo bestia.
El Cádiz terminó con un expulsado (Joni), Álex del Amor buscó anotar pero Joni salvó el segundo amarillo y el Xerez dispuso de varias ocasiones desde lejos para lograr la manita junto a un palo de Joselu. A falta de 5 segundos, el Cádiz anotó el definitivo 4-2. Primera victoria del Xerez Deportivo FC Toyota Nimauto en la primera jornada liguera en Segunda B ante un Cádiz, favorito pero inferior. Inmejorable inicio de temporada para los de Azurmendi. En el Ruiz Mateos todo es posible.