El Xerez DFC Toyota Nimauto cayó derrotado por la mínima en su primera salida de la temporada por 4-3. Los xerecistas realizaron el primero de los cinco desplazamientos a tierras murcianas para medirse a Futsal Molina, un equipo recién ascendido pero que ha conformado un gran bloque y se ha convertido en el primer verdugo de los de Azurmendi, filial del Cartagena, equipo de Primera División.
Los xerecistas lograron adelantarse en el marcador gracias a un gol de Joselu a seis minutos para el descanso. Pese a ello, el Futsal Molina lograba empatar la contienda en una de las últimas acciones del primer tiempo y con el resultado de 1-1 se llegaba al descanso.
Tras la reanudación, los locales culminarían la remontada con dos goles antes de llegar al ecuador del segundo periodo. Pese a todo, los xerecistas nunca bajaron los brazos y volverían a meterse en el partido con un gol de Dopico. Sin embargo, cuando mejor se encontraba el conjunto de Azurmendi, llegó el cuarto de Futsal Molina que sentenciaba el encuentro.
La desventaja obligó a Azurmendi a sacar portero-jugador en busca de al menos un empate. El gol de Isra avivó las esperanzas de conseguirlo aunque finalmente el resultado no volvería a moverse y con el resultado de 4-3 concluía el segundo partido del Xerez Toyota Nimauto. Los azulinos terminan la segunda jornada del campeonato con 3 puntos y en sexta posición, en una jornada donde el Cádiz Virgiili volvió a perder contra el Vinos DOP Jumilla FS, único equipo que ha logrado el pleno de puntos.
Esta era la opinión de Azurmendi tras el partido: “Faltó frescura. Un viaje tan largo al final te condiciona. Levantarte tan temprano y hacer tantas horas de bus te quita ese puntito de lo que eres. En ese sentido perdimos esa chispita que nos hace ser muy intensos en primera línea. Somos un equipo que nos gusta circular rápido el balón y nos faltaba esa frescura. Aun así creo que la primera mitad fue nuestra y que la controlamos bien, pero en el último minuto hubo un error de Christian incomprensible y los metió de lleno en el partido. Hicimos una lectura correcta del partido en el descanso pero no la supimos implantar luego en la cancha. Pedimos más circulación sin asumir riesgos en el uno para uno. Pero no hicimos lo correcto. Los goles le dio alas a ellos pero el equipo nunca bajó los brazos. Siempre compitió bien. Y cuando más cerca estábamos del 2-2 encajamos el 3-1 en un nuevo error que nos condicionó en sobremanera. Despertamos al final con el resultado. Nos pusimos 3-2, y cuando más cerca estábamos del empate, un nuevo error en saque de banda de ellos encajamos el cuarto. Eso al final es un lastre porque no te deja entrar de lleno en el partido. Fue un resultado justo”.
Foto e información: Xerez Toyota Nimauto
