Ocurrió el pasado sábado, día 29 de enero, en el Estadio Municipal de Chapín, durante el partido que enfrentaba al Xerez Deportivo FC y al Cacereño, donde ganaron los xerecistas 1-0 con gol de David Grande.
Ese sábado, tres chicos marroquíes ex-tutelados, que están acogidos en la asociación Voluntarios por Otro Mundo, acudieron al partido Xerez Deportivo FC vs CP Cacereño en Chapín. Estaban invitados por el Club y por el Kolectivo Sur, en el marco de una actividad intercultural que promueve esta asociación para integrar a chicos de otras culturas a través del deporte.
Los chavales acudían ilusionados a ver el partido, ataviados con una bufanda del Xerez CD SAD, puesto que es la única de la que disponían, e ignorantes siquiera de la diferencia entre equipos. Iban acompañados por una educadora de la asociación, accedieron al estadio, y en todo momento su comportamiento fue correcto. En el descanso del partido bajaron desde la grada a unos de los accesos. Pero uno de ellos, por despiste, había perdido su mascarilla higiénica, lo que motivó que se acercasen varios agentes de la Policia Nacional con un tono agresivo. Los agentes apartaron a los chicos, les identificaron y les cachearon delante de todo el mundo, sin atender las palabras de la educadora que les acompañaba.
Los chicos quedaron sobrecogidos y dañados del trato humillante; puesto que el “incidente” se hubiera resuelto de la manera más sencilla, simplemente instando al chaval que no llevaba la mascarilla a que se la pusiera; pero no, tuvieron que apartarlos del resto de aficionados y tratarlos como vulgares delincuentes, sin que nada motivara un registro delante del público (de hecho, no encontraron ninguna pertenencia que pudiera incriminarles en algo). Como dato a añadir, en ese momento había más gente sin mascarilla, pero los agentes sólo se dirigieron a estos muchachos. Los chavales, después de este abuso de poder policial, se marcharon indignados y dolidos por el trato, sin ver la segunda parte del partido.
Desde Voluntarios por Otro Mundo y la Red Dimbali denuncian públicamente esta intervención desproporcionada, que califican como racismo policial, y seguirán denunciando todo acto que juzgue a una persona por su raza, forma de vestir, etc.
“Si así tratamos a los jóvenes migrantes no esperemos de ellos otros valores como la tolerancia, el respeto a la diferencia… bastante pasan ya estos jóvenes, como para tener que vivir estas situaciones que sólo generan violencia y desprecio. ‘No al racismo’ en cualquiera de sus formas”, declaran desde la organización.
FOTO: Manuel García
